vladimir sersa
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de la serie: letreros que se ven. 1977.
Sales de plata en gelatina, papel Agfa.
25,5 x 20,1
cm.
Vladimir Sersa es un fotógrafo que documenta
Venezuela en su cotidianidad. Apunta la desolación, el abandono, el deterioro y
la ausencia de memoria, que como una pátina decantada se instala en sus
poblados y ciudades, sea en las hermosas construcciones coloniales y modernas o
en las construcciones artesanales de los caseríos. Sus imágenes documentan el
misterio y la renuncia de un país que niega sus propios encuentros al
condenarlos a la desolación y el silencio. Documentan también la textura de su
cuerpo social: personas y escenas que parecieran testigos intemporales,
instantes y momentos detenidos de un lugar en el que el antes y el después
parecieran intercalarse. Su trabajo fotográfico ha sido un testimonio poético
de la dura realidad venezolana, que muchas veces se instala en el límite de la
ruina y otras, se impone a través de un paisaje tamizado de presencias mudas,
de actividad humana.